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Polis y ética.

  Ante tanta duda acerca de a qué "tendencia política" yo soy afín y que es lo que yo considero como correcto o incorrecto, me he...

jueves, 19 de mayo de 2016

Fides.

   Lo primero que voy a decir, antes de empezar a explayarme, es que no pretendo con esto que la gente cambie su orientación, o no orientación, religiosa. Estamos en el siglo XXI, aquí cada quien hace lo quiere y cree en lo que quiere creer y no necesita ser convencida de sus creencias ya que, para mí, eso debería ser una decisión personal y no impuesta, ni inducida, por nadie (incluyo ahí a los padres). Para culminar este "inciso introductorio" señalo que, como este es un tema bastante sensible y complejo, no quiero ofender las creencias de nadie ni juzgar a nadie a pesar de que, como bien sabrán, seré bastante crítico y directo sobre lo que pienso. Vamos al asunto...

   Para cualquier persona que haya tenido la oportunidad de verme alguna vez, se le hace imposible no fijarse que de mi cuello cuelgan un rosario y una especie de cadena de cuero con el símbolo de la cruz. Aquí en España, me he dado cuenta de que a eso a la gente le ha llamado mucho la atención; la verdad es que no he visto a mucha gente con adornos religiosos, y mucho menos a gente de mi edad. Lo cierto es que, al haber nacido y crecer en un país latinoamericano, la religión que se me inculcó desde recién nacido fue el catolicismo y es algo con lo que crecí como parte de mi vida cotidiana, como la gran mayoría de venezolanos. Es decir, que soy "católico" (verán el porqué de esas comillas más adelante), en principio, porque sí, porque en Venezuela esa es la tradición y mis padres son católicos. Así es como "deben" ser las cosas.
   Así como yo, sé que hay miles de millones de casos en el mundo, sí, miles de millones. Sea de la variante que sea o la religión que sea, normalmente son inculcadas en nosotros sin nosotros, si quiera, tener una mínima capacidad de decisión sobre si queremos creer en eso o no. Y no, por supuesto que eso no está bien, y no está bien no porque alguna de las muchas de las religiones que hay están mal, sino porque no considero correcto que a cualquier ser humano se le obligue a creer en algo en específico, o no creer, sin que éste pueda tomar la decisión de hacerlo ya que, al final, eso puede definir tu vida y cómo vas a vivirla en algunos casos.
   Dicho esto, ¿a pesar de que la religión católica me fue inculcada de pequeño, ahora que ya soy mayor y tengo la tendencia a dudar de todo y usar la crítica basada en el razonamiento de los hechos, con todas las incongruencias que tiene la Iglesia y la religión en sí, sigo siendo católico? Es mucho más complejo que eso. En realidad, yo me considero creyente de Dios, mas no creyente de la Iglesia Católica como Institución. Las razones son más que obvias, pero voy a resumirlas (no quiero hacer de este texto un testamento) diciendo que es una de las instituciones más incoherentes del mundo y que muchos de sus representantes cometen atrocidades o se hacen la vista gorda ante ellas, lo que, a mis ojos, los hace cómplices de las mismas.
   Ahora bien, más allá de eso y de la religión católica en sí, para mí es indudable el hecho de que existe algo más... Algo superior a nosotros que no somos capaces de entender, que nuestra mente no puede siquiera comprender porque no podemos hacerlo y, por ende, lo vemos como una locura. Los seres humanos ni siquiera hemos sido capaces de explotar el potencial que puede ofrecer nuestro cerebro, como para creernos dueños de la verdad de un universo que es escalofriante de lo inmenso que es. Literalmente somos menos que lo que equivale una hormiga para el planeta Tierra, es demasiado simplista, para mí, creernos los únicos y vendernos a nosotros mismos una verdad que no estamos ni cerca de demostrar ni comprobar. Tampoco creo que es demasiado prudente sacar conclusiones de algo cuando lo que conocemos como seres es ridículamente inferior a lo que ignoramos, y que, en realidad, la especie humana es una especie relativamente joven para la edad de la Tierra (ni hablar de lo demás).
   Las personas han inventado, y seguido, las religiones porque, en el fondo, necesitan creer en algo que explique lo que no podemos explicar por otros medios... Además, necesitan que algo les dé cierta seguridad y paz ante las incertidumbres que genera algo tan real, misterioso e incomprendido como la muerte; sin tampoco dejar de lado esa asquerosa costumbre humana de "seguir al superior", que nos hace tanto daño cuando se extrapola a sistemas más pequeños. Particularmente creo que todos creen en algo para sentirse en paz con su propio ser, sean por las razones que sean. Incluso los ateos, porque los ateos, al no creer en la existencia de ningún dios ni pertenecer a ninguna religión, sus argumentos siguen siendo creencias ya que la "no existencia" de algo es algo que debe ser demostrado porque, de lo contrario, puede existir la posibilidad de que exista. Ni siquiera niego el hecho de que son muchas más sólidas las razones por las que no creer que para creer, siendo estríctamente críticos. Al final, por nuestra propia incapacidad de poder resolver estos enigmas, nada podría decirse que es correcto o incorrecto. Es así de inconcluso y hasta que no podamos aclarar el panorama de alguna manera, seguirá de esa manera. Por ende, veo las disputas religiosas algo increíblemente inútil, innecesario y que lleva a un camino sin salida, o con múltiples salidas del que no se puede obtener nada demasiado concluyente.
   ¿Por qué creo, concretamente, en Dios? Las razones, apoyándome en las ideas anteriores, pueden llegar a simplificarse bastante. Sin embargo, para mí resulta necesario exponer detalladamente lo que pienso acerca de este argumento: "Si existe un dios, ¿por qué deja que pase tanta mierda en el mundo?". Si creyera en que Dios es malo, seguramente no creería en Él; pero, es verdad, ¿por qué deja que pasen tantas cosas? En primer lugar, no tengo ninguna impresión de que los "dioses" sean entes creadores y controladores de las vidas de las personas... Soy defensor del individualismo y de que cada quien es el dueño de su vida, y que ahí no hay dios de por medio que valga ni que tenga definido qué vamos a hacer. En el mundo pasa lo que pasa, no porque Dios sea malo, sino porque los seres humanos somos de lo peor que pudo haber pisado este planeta en muchísimos aspectos. Y eso no es culpa de nadie más que de nosotros mismos... Nuestra propia capacidad de razonar y el egoísmo innato del ser humano, que viene inculcándose desde la lucha por la supervivencia, nos hace actuar de manera en que olvidemos que somos parte de algo más grande que lo que nos rodea y nuestra vida. Nos falta empatía con nuestra especie, con nuestro entorno, con los problemas de otros que, en cierta forma, podrían llegar a afectarnos... Hemos dejado que la razón nos lleve a olvidarnos de que hay cosas más importantes en esta vida que los bienes que nosotros mismos nos inventamos para nosotros mismos. Y, eso, tampoco es culpa de la razón, si no culpa de los seres humanos que no la utilizan como deben hacerlo o para causas en donde se busque el beneficio personal y colectivo... Somos nosotros mismos culpables de nuestras desgracias, nadie nos ha metido ahí mas que nosotros y no creo que, de existir un dios, se interesara mucho en ver como una raza es tan orgullosa que, viendo que se está autodestruyendo, sigue anteponiendo intereses y necesidades propias, antes que salvarse y cuidar lo que tiene, o a su semejante, a pesar de las diferencias. Creemos que tenemos conocimiento, ¿pero de verdad que somos inteligentes? Cada día se demuestra más que no.
   Expuesto todo esto, mencionado ya el hecho de que sólo creo en Dios, ¿puedo considerarme un católico en el sentido estricto de la palabra? No lo sé. (De ahí las comillas de arriba) Tampoco necesito saberlo, porque yo pienso como pienso y pueden llamarme como quieran. ¿Por qué Dios, y no otro, u otra teoría? Haciendo una síntesis de todo: Creo en la figura católica de un dios, porque es la figura que conocí de pequeño... Y sigo creyendo en Él porque, en cierta forma, me da paz espiritual cuando no encuentro paz en el caótico infierno de mundo en que vivimos. Creo muchísimo en el poder de la mente humana, y en lo que es capaz de hacer. Cada vez que he necesitado de un empujón extra que no encuentro aquí, deposito mi fe en esa figura y las cosas mejoran y cada vez, sí, cada vez, que lo he hecho me ha traído resultados tremendamente positivos. No pido cosas irreales, sólo pido por mi fortaleza personal... No soy tan iluso, ya dije que no creo que ningún tipo de dios tenga influencia en el devenir del mundo, sólo nosotros. Creo en Dios porque depositar mis pensamientos y anhelos en esa figura me funciona, y me ayuda personalmente. No creo que se pueda ser más sincero que eso.
   Es por esto que, seguramente, a pesar de que sea una persona escéptica, crítica y analítica, si alguna vez tienen la oportunidad de verme en cualquier momento, sigan colgando de mi cuello esas dos prendas que representan la creencia, al menos para mí en base a experiencias personales, que yo justifico en la figura de Dios y que no me acomplejan ni me limitan en lo más mínimo ya que es algo que hago por decisión propia que no representa tener más ignorancia de la que ya tenemos todos de por sí. Ser religioso no te hace ignorante, ni ser ateo te hace mejor que un religioso.

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