Polis y ética.

  Ante tanta duda acerca de a qué "tendencia política" yo soy afín y que es lo que yo considero como correcto o incorrecto, me he visto con la necesidad, y el gusto, de escribir acerca de esto de una manera detallada y concreta. Sólo para que la gente se quite las dudas de por qué opino lo que opino, y dejen de ponerme etiquetas políticas absurdas por cada comentario que hago, que distan muchísimo de la verdad, de paso.

   Lo voy a decir así de claro y desde el principio: Soy de oposición... y no de la oposición venezolana, no me refiero a eso. Soy opositor de cualquier gobierno en el sentido de que soy crítico de cualquier gobierno, no porque me guste criticar, sino porque la crítica es la base para el crecimiento y porque de la crítica se pueden obtener más cosas positivas que negativas si es fundamentada o tiene una causa legítima. No es criticar, por criticar, es exigir al gobierno que está de turno, al partido, o a la organización, que cumpla bien con un trabajo que involucra no sólo a ellos mismos sino a un buen puñado de personas a las que deben representar y que, nada menos, han depositado su confianza en su figura. Nada más por ese hecho, hay que exigir, y exigir no por deporte sino para que se hagan bien las cosas que nos afectan a todos como sociedad e individuos. Tampoco es que hay que criticar sólo lo que no te agrade, considero que se debe cuestionar, sobre todo, a lo que te agrada... Porque sí, lo que te gusta también tiene defectos, y precisamente hay que aceptar esos defectos y luchar porque sean los menos posibles o, en el caso de un partido o presidente, que afecten a las personas lo menos posible. Admitiendo que lo tuyo puede también estar mal, es dar un paso adelante en la vida, porque nadie te va a evaluar mejor que tú mismo.



   Ahora bien; no soy de derecha, ni soy de izquierda, tampoco soy del centro, ni hablar de las "ultras"... De hecho, no le encuentro ni mucho sentido a esos términos, ni me importa demasiado si el partido que está gobernando es de izquierda o de derecha. Porque, en realidad, para mí, eso importa una mierda si el partido hace un mal trabajo y los políticos de turno lo que hacen es aprovecharse del pueblo y no cumplen lo que prometen ni en un 50%. Al final, la gente que pasa hambre, el hombre que pierde su trabajo, los que les cuesta llegar a fin de mes, quieren y necesitan soluciones... Y creo que para dar soluciones a los problemas del país que gobiernas, no tienes que elegir una dirección determinada, sólo tienes que tener la voluntad de hacer las cosas bien para todos.

   ¿Que si se es de izquierda o de derecha cambian las políticas y la forma de solucionar las cosas? ¿Que hay países que en momentos concretos necesitan más de izquierda que de derecha, o viceversa? No voy a negarlo. Pero no corresponde a los políticos decirnos qué hacer o qué decidir, es responsabilidad de la gente, del dichoso "pueblo", que debería tener una educación política y estar consciente de los problemas que padece como individuo y ente de una sociedad, decidir lo que es lo mejor para su país. Y, claro, esa oportunidad no las da la democracia, pero, planteo la pregunta, ¿cuántas personas en realidad votan con el cerebro, pensando más allá de un partido o de la imagen de un líder, y no con el estómago?

   Soy de los que cree que la democracia es mucho más que una forma de elegir a nuestros gobernantes, que va más allá de si hay elecciones libres, secretas y justas. Soy de los que cree que existen valores y conductas democráticas, que se deben tener en cuenta a la hora de evaluar la democracia en un país o no... Para mí, la democracia no se expresa en un día de elecciones, se expresa en nuestro día a día, en la lucha contra la exclusión, y por la búsqueda de la justicia y el castigo de los abusos. Pienso que hay muchos gobiernos escogidos de manera democrática, pero gobiernos y sociedades poco demócratas en su día a día. Al final, siempre lo he dicho, y ya esto es ir mas allá de la democracia y sus valores como tal, las gobernantes son un reflejo de lo que somos en el fondo como sociedad, y el poder saca lo peor de sus, nuestros, defectos.

   Soy de los que cree que los políticos trabajan para nosotros, que ellos deberían respetarnos a nosotros y sentirse iguales a nosotros, porque lo que han logrado en parte es gracias a nosotros, y que los que tenemos el poder somos nosotros. El pueblo es su propio líder, el pueblo debería saber que es lo que quiere y ser duro e inflexible a la hora de que se propongan soluciones a sus problemas. Creo que los políticos deberían sentirse presionados, y ser responsables, al saber que tienen una sociedad detrás que no es ignorante y los vigila. Les aseguro que así habría muchos menos políticos, pero los pocos que habrían serían mejores porque estarían dispuestos a asumir el reto de ser exigidos por una sociedad crítica que sabe qué problemas tiene y quiere soluciones eficientes.

   Soy de los que piensa de que la "política" actual se resume al tiempo de elecciones y lo demás no importa. Soy de los que cree que los políticos nos ven como si fuéramos números nada más, como si fuésemos un voto y lo que importa es conseguir ese voto para el día de elecciones y ya después que nos jodamos todos. Creen que tienen licencia para decepcionarnos, o simplemente les sabe a mierda hacerlo. Por eso es que prometen, y prometen, y fingen carisma para convencernos y decirnos lo que nos parece bonito para que vayamos a votarles. Y hacen eso no sólo porque son unos descarados, sino porque saben que pueden hacerlo ya que se los permitimos, ya que somos fáciles de convencer, ya que no vemos más lejos de las palabras que nos dicen, ya que no nos ponemos a analizarlos y evaluarlos.

   Soy un votante infiel, que, si bien tiene sus preferencias como todo el mundo, también está consciente de que un mismo partido puede cambiar y puede proponer cosas que antes me gustaban y que ahora no me gustan. Todo cambia en la vida, los partidos también, las políticas también, los contextos socio-políticos y económicos cambian en cada elección también, el mundo también... ¿Por qué voy a ser tan terco para, siquiera, evaluar todas las opciones y evaluar la posibilidad de cambiar?

   Soy de los que cree que vivimos en un mundo desigual por naturaleza, porque todos vinimos al mundo siendo diferentes con diferentes aptitudes y actitudes. Soy de los que cree que en el mundo no hay que meter a todas las personas en un mismo cajón, porque si bien todos somos humanos, todos somos distintos y un mundo de posibilidades. El mundo no necesita que todos nos igualemos, o que ganemos lo mismo en dinero... El mundo necesita que todos tengamos la misma oportunidad de ser distintos, felices, y llenarnos hasta donde puedan llegar nuestros sueños a nuestra manera. Todos en el mundo deberíamos tener la oportunidad de ser distintos, y de hacer lo que nos gusta. Porque en el mundo hay de todo para todos, y creo que hay un espacio para cada persona en el planeta porque pienso que todos venimos aquí con un don, con algo que hacemos bien que podemos explotar y que la vida se resume en lo único que de verdad importa que es ser feliz. Hay personas que son felices sin necesidad de ver cuántos ceros a la derecha tiene su salario, porque hacen lo que les gusta hacer y pueden sobrevivir con eso en este mundo en donde manda el dinero.

   Soy de los que cree que en el mundo hay muchas cosas que están mal, y que necesita cambiar... Pero no podemos pretender que unos cuantos lo cambien por nosotros mientras nosotros seguimos pasivos. Y mucho menos se puede pretender que se cambie sólo por la promesa de cambio de unos cuantos. Ya que a lo largo de la historia son miles los que han prometido cambio, pero que terminan siendo igual que el resto. No hay que creer en el cambio, hay que ser el cambio que queremos. Siempre lo defenderé, porque el mundo sigue el mismo curso de siempre porque no asumimos esa responsabilidad.

   Soy de los que piensa que hablar de política y políticos resulta poco importante mientras la sociedad no alcance estadios más altos de modernidad. Porque no podemos pretender que las cosas cambien, o que venga un mesías a cambiarlas por nosotros, si nosotros seguimos siendo iguales siempre. Ya que, al final, llegar al poder prometiendo cambio es más de la misma fórmula que se ha aplicado en cientos de países y es en una contada minoría en donde las cosas han cambiado de manera sustancialmente positiva. Queremos que no nos roben, pero no respetamos la ley. Queremos políticos que gobiernen para todos, pero nosotros sólo nos preocupamos por nosotros mismos y buscamos lo que nos traiga más beneficio sin importar el otro. Con estas, y otras más, incongruencias, ¿cómo se puede aspirar a realmente algo mejor, algo distintamente mejor? Sobre todo cuando los políticos salen de los mismos núcleos familiares que inculcan estas cosas, dándose o no dándose cuenta de que lo hacen.

   Soy lo que soy, lo que pienso, y mis acciones. Soy más de personas que de ideales. Respeto los pensamientos de todos, a los que defienden a su izquierda y su derecha y a su partido. Pero, por favor, no etiquetes y juzguen a las personas que dicen algo distinto... Sobre todo porque eso demuestre más mi punto, una sociedad que no es tolerante no puede aspirar a demasiadas cosas. La tolerancia es uno de los principales valores de la democracia y la libertad. Además, que no entiendo tampoco por qué tu pensamiento político tiene que definirte como persona... Seas de lo que seas, eso no debería darte ni quitarte la calidad humana, ni lo que eres en general... Las cosas no pueden avanzar de una manera adecuada, cuando tu forma de pensar hace que la gente te estigmatice de la manera en cómo veo que lo hace la mayoría.

   El momento es ahora, podemos ser la generación que inició el cambio que el mundo necesita u otra más de las generaciones que pasó por la historia o contribuyó más a la deshumanización de la humanidad. El mundo necesita de más empatía, de más tacto, de menos anarquía e intereses, y ningún político ni líder se va a preocupar como tiene que hacerlo por la gente que representa si eso no se inculca desde las bases y los núcleos de nuestra dinámica social.